El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este miércoles 28 de octubre de 2020 un segundo confinamiento nacional desde este viernes 30 de octubre hasta al menos finales de noviembre de 2020, tras el registro de aumento de casos confirmados de covid-19 en el país europeo.

Los negocios no esenciales, como restaurantes y bares cerrarán, pero las escuelas y fábricas permanecerán abiertas.

En un discurso televisado, Macron aseveró que Francia debe ahora «aplicar brutalmente los frenos» para evitar ser «sumergido por la aceleración de la epidemia».

«El virus circula a una velocidad que ni siquiera los pronósticos más pesimistas habían anticipado», precisó; y agregó que la mitad de todas las camas de cuidados intensivos en los hospitales franceses estaban ocupadas por pacientes de covid-19.

El jefe de Estado francés añadió que bajo las nuevas reglas, las personas tendrían que completar un formulario para justificar la salida de sus hogares, como se requirió en el cierre inicial en marzo. Las reuniones sociales están prohibidas.

«Como en la primavera, sólo podrá salir de su casa para trabajar, para una cita médica, para brindar asistencia a un familiar, para comprar artículos esenciales o para dar un paseo cerca de su casa», dijo Macron.

Pero dejó en claro que los servicios públicos y las fábricas permanecerán abiertas, y agregó que la economía «no debe detenerse ni colapsar».

Las muertes diarias del coronavirus en Francia están en el nivel más alto desde el pasado abril, según informó BBC News. Ayer, se confirmaron 33.000 nuevos casos.

Macron dijo que el país corría el riesgo de ser «abrumado por una segunda ola que sin duda será más dura que la primera».

Mientras tanto, Alemania impondrá un bloqueo de emergencia que es menos severo pero que incluye el cierre de restaurantes, gimnasios y teatros.

Las infecciones están aumentando drásticamente en Europa, incluido el Reino Unido, que el miércoles anunció 310 nuevas muertes y 24.701 nuevos casos registrados oficialmente.

En Inglaterra, un nuevo estudio estima que casi 100.000 personas contraen el virus todos los días, y los investigadores advierten que «algo tiene que cambiar».

Los toques de queda nocturnos están en vigor en varios países, incluso para 46 millones de personas en Francia.