Técnica, táctica y estrategia con liderazgo femenino. Alexandra Orozco, rectora del ISTFQ abre camino en el fútbol a través de la academia. 

Alexandra Orozco nos recibe en la cancha del Instituto Superior Tecnológico de Fútbol de Quito de la FEF. Este escenario verde tiene un tinte violeta desde 2016 cuando aceptó el reto de ser Vicerrectora y transformar el fútbol en algo académico. Durante su gestión hizo un rediseño de carrera. Trabajó en una nueva malla curricular, con los docentes, que fue aceptada por la Conmebol. 

Parvularia de profesión, maestrante en gerencia de proyecto sociales y educativos, certificada en coaching transformacional, Alexandra trabajó 15 años como parvularia, fue docente, coordinadora de desarrollo curricular y Vicerrectora del Instituto de la Policía Nacional. “Yo creo que la vida nos lleva por la misión que tenemos que cumplir”, nos dice. 

Tras 7 años siendo parte del mundo del rey de los deportes, ha demostrado que el fútbol es un catalizador de la igualdad de género y del empoderamiento de la mujer. Bastan unos pocos minutos para entender que abrir caminos para las nuevas generaciones no es fácil y que se requiere de talento, preparación y mucha determinación. “El saber que las mujeres podemos convertirnos en grandes víctimas o muy responsables de nuestro destino y yo creo que me enganché con esta parte de la responsabilidad y de aprender a generar y gestionar dentro del mundo de los hombres especialmente en el área académica”, comenta  Alexandra. 

Durante su gestión ha liderado proyectos como: fortalecimiento de la oferta académica para profesionalizar el fútbol ecuatoriano, consolidación de certificación de Licencias de Entrenadores para estudiantes ISTFQ, curso de 300 horas para futbolistas de amplia trayectoria, Programa de Validación de Ejercicio Profesional, Diplomado en Preparación de Arqueros y Preparación Física y campaña de becas para mujeres en el fútbol. Además, ha dado paso a proyectos de vinculación con la comunidad de alto impacto, en beneficio de niñas y adolescentes víctimas de violencia; así como, de carácter ambiental, enfocado a la adecuada gestión de residuos. “Creo que no es el hecho de ser mujer, el que uno esté aquí, si no las capacidades que uno demuestra para poder manejar  lo que a uno le ponen a cargo, entonces no se trata de ser hombre o mujer”, indica.

Como rectora del ISTFQ busca inspirar a niñas y adolescentes a perseguir sus metas. En el Instituto ha generado nuevas oportunidades para que las mujeres pueden capacitarse, sin embargo, muy pocas lo hacen. “Tenemos un porcentaje muy bajo de mujeres que desean ser Directoras Técnicas …Tenemos de cada 60 estudiantes, solo 2 mujeres que quieren ingresar”. Tenemos para ellas hasta un 50% de descuento para motivar a las chicas a ingresar al mundo del fútbol”

La carreras que se ofrecen son: 

Tecnología en dirección técnica de fútbol: Duración: 5 periodos académicos • Modalidad: híbrida. 

Tecnología en Administración Deportiva: Duración: 5 periodos académicos • Modalidad: Virtual. 

El fútbol también permite ayudar a las niñas, adolescentes y mujeres víctimas de la trata de personas. Jóvenes son capacitadas como futuras jugadoras y aprenden la técnica, la táctica y la estrategia del fútbol de esta manera logran desarrollar habilidades blandas y la empatía que les permitirá nuevamente a confiar en sí mismas y reinsentarse en la sociedad. 

Su visión y liderazgo han permitido abrir caminos en el mundo del fútbol demostrando así que las mujeres llevan la delantera cuando se trata de jugar en equipo. 

“Creo que el fútbol es una herramienta poderosa de transformación social que puede ayudar a que los jóvenes y los niños a tener un mejor futuro, una mejor visión, a que puedan proyectarse a futuro, que puedan tener un plan de vida y puedan ver que los NO no existen sino que existe realmente el dar el paso, equivocarse, caerse y volverse a levantar y seguir adelante y de eso se trata”.