Cientos de simpatizantes del Presidente Guillermo Lasso e integrantes del partido oficialista (CREO) llegaron hasta la Plaza de la Independencia como una respuesta anticipada a las movilizaciones anunciadas por varias organizaciones sociales.
“Vamos a defender a Quito de aquellos que les gusta la violencia, de aquellos que quieren incendiar edificios públicos. Aquí está el pueblo ecuatoriano para decirles que no lo vamos a permitir” aseguró el primer mandatario en su discurso que duro alrededor de 30 minutos.
El pasado 18 de octubre la Confederación de Nacionalidades Indígenas (CONAIE), el Frente Unitario de Trabajadores (FUT), Frente Popular, entre otras organizaciones sociales convocaron a una movilización para el próximo 26 de octubre. Esto debido a la falta de respuestas a sus pedidos entre los que figuran el congelamiento de los combustibles.
A lo que el primer mandatario respondió “este octubre no van a poder incendiar edificios ni secuestrar a nadie”. Agregó que su mano está extendida para un diálogo democrático; pero que, en caso de ser necesario, se enfrentará a los “golpistas con decisión y sin miedo”.
“El gobierno los va a proteger porque estamos trabajando por la seguridad de la familia ecuatoriana. Ahora, con el apoyo de las gloriosas Fuerzas Armadas junto con la Policía Nacional daremos protección en todo el territorio ecuatoriano” manifestó el presidente. Esto en medio de un estado de excepción que durará 60 días para frenar la ola de delincuencia que atraviesa el país.
Además, Lasso aseguró que durante este tiempo en el poder se han generado 200 000 empleos adecuados y cumplió con su plan de vacunación. Hasta el balcón presidencial también llegaron la primera dama, María de Lourdes Alcívar, la ministra de Gobierno, Alexandra Vela; el vicepresidente, Alfredo Borrero y otros funcionarios de gobierno.