Sayed Sadaat dejó en el año 2018 su cargo de ministro de Comunicaciones en Afganistán y llegó a Alemania hace casi un año para ganase la vida en bicicleta repartiendo comida a domicilio.

El hombre de 49 años tiene títulos en informática y telecomunicaciones, dejó el ministerio en 2018 y en septiembre del año pasado se trasladó a Alemania con la esperanza de conseguir un mejor futuro. Sin embargo, la por la que no pudo encontrar un trabajo pese a sus maestrías y sus 20 años de experiencia laboral en ámbitos diplomáticos, fue el idioma; Sadaat no sabía hablar alemán.

Su jornada es de seis horas de lunes a viernes, desde el mediodía hasta las 22H00 el fin de semana. Sayed lleva un uniforme de color naranja, característico de su empresa, y la mochila donde transporta los pedidos para sus clientes.

Las fotografías del exministro en su nuevo trabajo circulan por las redes sociales generando múltiples comentarios a los que él respondió: “No me avergüenzo de mi trabajo y no me siento inferior. No creo que los afganos se avergüencen de tener un exministro trabajando, pero sí estarían avergonzados si recibiera dinero social”.