Autor: Emily Yugsi
El Pleno del Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos emitió una resolución que prohíbe el ingreso, comercio, distribución y uso de todo tipo de fuegos artificiales, incluyendo la llamada “pirotecnia fría”, en las celebraciones de Año Nuevo. La medida, anunciada este 26 de diciembre de 2024 por el Ministerio de Turismo, tiene como objetivo proteger la flora y fauna del Archipiélago y fomentar un turismo sostenible.
A solo cinco días de que finalice el año, la provincia de Galápagos refuerza su compromiso con la conservación de su ecosistema único. Los fuegos artificiales generan efectos negativos significativos en las especies locales: los estruendos
desorientan a las aves, interrumpen sus patrones de vuelo y las obligan a abandonar sus nidos, dejando a sus crías en peligro. Los mamíferos marinos, como los lobos marinos, también experimentan estrés y alteraciones en su comportamiento natural, mientras que los residuos tóxicos de la pirotecnia contaminan los frágiles ecosistemas marinos.
La resolución permite el uso de pirotecnia exclusivamente para señales de auxilio, emergencias y actividades relacionadas con las Fuerzas Armadas, Seguridad o Defensa Civil, siempre dentro del ejercicio de dichas funciones.
Con esta decisión, Galápagos reafirma su compromiso con la conservación de su biodiversidad, declarada Patrimonio Natural de la Humanidad, y envía un mensaje a residentes y turistas: las celebraciones responsables son clave para proteger este paraíso único en el mundo.
“Celebra sin pirotecnia y ayuda a cuidar Galápagos”, es el llamado de las autoridades para este fin de año, recordando que la sostenibilidad es fundamental para preservar la magia de las islas