El vicealcalde del Distrito Metropolitano de Quito, Santiago Guarderas, confirmó su distanciamiento total con el alcalde Jorge Yunda, tras la revelación de los chats de su hijo Sebastián Yunda, que reflejan un presunto tráfico de influencias dentro del Municipio de la capital.

Guarderas señaló que no ha solicitado directamente la renuncia al alcalde, ni ha sugerido que tome una licencia temporal de su cargo, por lo que asegura que corresponde a su decisión personal ante las consecuencias.

«Aquí hay una responsabilidad política, yo he sido claro, he invitado al alcalde Jorge Yunda para que analice en su conciencia, si debe aceptar una ausencia temporal o definitiva, pensando en los intereses de la ciudadanía y no en las suyas propias», indicó el vicealcalde durante su entrevista en el noticiero «A Primera Hora», transmitido por Radio Majestad.

Ante los anuncios de Yunda en los que ratifica que no renunciará a su cargo, Guarderas manifestó que el alcalde no está reconociendo que la situación afecta gravemente a la imagen administrativa de la municipalidad, por lo que se encuentra «caída» y la ciudad de Quito «echada a su suerte».

El vicealcalde cuestionó el posible desconocimiento de Yunda frente a los supuestos actos de corrupción de su hijo y conversaciones difundidas entre funcionarios del municipio. Pues mencionó que, si fuera verdad, resultaría contradictorio que haya solicitado la expulsión de varios trabajadores cercanos en la municipalidad.

Este viernes 9 de abril, se llevará a cabo la sesión de la Comisión de Mesa del Municipio Metropolitano, en la que se dará a conocer la excusa de Yunda, quien debido al pedido de remoción del colectivo “Quito Unido”, no podrá formar parte de la reunión.