El pasado 15 de julio, el exlíder de la ahora extinta Secretaria de Inteligencia (Senain), Pablo Romero, fue declarado inocente del delito de peculado en el caso “Caminito”. Esto después de que dos de los tres jueces que conformaban el tribunal no comprobaran el mal uso de los fondos públicos.

Juan Carlos Perea, abogado defensor de Romero, en una entrevista en el programa “A primera Hora”, de Radio Majestad, señaló que la Fiscalía no pudo probar los dos hechos fácticos del caso. El primero correspondiente a comprobar la ilegitimidad de la operación “Caminito” y el segundo a evidenciar la inexistencia del “Ruso”, asesor de la operación.

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El juez Marco Rodríguez, uno de los tres jueces que manejaban el caso, no estuvo a favor de la resolución final. Debido a que, a su consideración, Pablo Romero si cometió peculado y debía ser condenado a 8 años de prisión.

Acerca de esto, Perea respondió que dos de los tres jueces del caso aceptaron la no culpabilidad de peculado por parte Pablo Romero «lo que implica que no hubo un delito, no hubo una mala utilización de los fondos públicos y que por ende no hay ningún culpable«.

De esta manera, se probaría la existencia de la operación “Caminito”, la cual consistía en una operación en cubierto de 9 meses. En donde se destinaría más de 100 mil dólares a un miembro conocido como “El Ruso” quien en realidad sería Eduard Soler; el cual entregaría información de un grupo de hackers que tendría datos de varias entidades públicas y claves de correos electrónicos de varios funcionarios del estado. En total la operación habría costado más de 160 millones de dólares llevarla a cabo.   

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Sin embargo, aún hay detalles en el caso que se mantienen en duda. Fiscalía, a pesar de las pruebas presentadas, aún sigue poniendo en duda la actividad del personaje “el Ruso” en las operaciones.  

Juan Carlos Perea, ante la posición de la fiscalía, expresó que hasta el día viernes la entidad debe presentar su apelación y tras esto se realizará una audiencia de juicio para exponer los argumentos.

Al momento, Pablo Romero se encuentra cumpliendo una sentencia de 9 años de prisión por el delito de secuestro en el caso Balda. Esto, tras ser extraditado desde España en febrero de 2020.