Se suscribió el memorando de entendimiento entre la Organización de Naciones Unidas y el Gobierno Nacional, que establece el programa contra la corrupción. El acuerdo se orientará al fortalecimiento de las capacidades nacionales, a través de asistencia técnica e intercambio de buenas prácticas.

El Primer Mandatario, Guillermo Lasso, lamentó que, según un estudio regional del Banco Interamericano de Desarrollo del 2019, la corrupción, en años recientes, le habría costado a Ecuador 70.000 millones, de los cuales 40.000 millones de dólares, corresponderían a sobreprecios y desvío de fondos, y 30.000 millones de dólares, a ineficiencia en las obras ejecutadas.

E indicó que: “La corrupción afecta a todos los sectores de la sociedad, porque nos roba recursos para salud, educación, vialidad y otras obras prioritarias del desarrollo (…). Tenemos que castigar a los corruptos y el castigo debe ser ejemplar”. “Es mi deber, como presidente de la República, trabajar incesantemente para reparar y evitar más daño a la sociedad.

Además, anunció que próximamente presentará la política pública anticorrupción, que guiará el trabajo de la Comisión Interinstitucional Anticorrupción y su relación complementaria con las autoridades de control.

De su parte la coordinadora residente de las Naciones Unidas en el Ecuador, Matilde Mordt, coincidió con el jefe de estado en los daños que produce este mal: “la corrupción retrasa los esfuerzos del país para mejorar sus niveles de desarrollo y reducir las desigualdades”. Por ello, insistió en la importancia de aunar esfuerzos.

Y agregó que ya se está trabajando en acciones concretas e inmediatas para disminuir este mal que afecta a la sociedad.