Más de 100 adoquines desprendidos, puertas dañadas y graffitis, es el saldo que dejaron los enfrentamientos entre policías y manifestantes la tarde de este martes 26 de octubre, en la Plaza de Santo Domingo. Esto durante las movilizaciones convocadas por varias organizaciones sociales. El monto de los daños en el Centro Histórico llegaría a los 6 000 dólares.
Desde esa misma noche y hasta la mañana de este 27 de octubre, al menos dos cuadrillas de obreros y equipos técnicos del Instituto de Patrimonio Municipal (IMP) recorrieron las zonas afectadas y trabajaron en su restauración. Misma que se estima durará una semana, esto pues se debe reponer el material patrimonial.
Erika Villalba, directora de Fiscalización de esta entidad, aseguró que el informe de pérdidas y vulneraciones ya se envió a la Fiscalía para que tomen las acciones pertinentes. Al momento, cinco personas están detenidas y serán investigadas por destruir bienes públicos y agredir a servidores policiales; pues habrían usado precisamente los adoquines de la plaza como proyectiles.
Mediante un comunicado el municipio capitalino señaló que la Agencia Metropolitana de Control “realizará los procesos correspondientes para para la sanción administrativa que hubiere en el lugar”. De su parte el alcalde Santiago Guarderas criticó esta acción mediante redes sociales. “El primer Patrimonio Cultural de la Humanidad no merece ser destruido” escribió.
Villalba asegura que para este segundo día de manifestaciones se ampliará el cerco del casco colonial; el cual, hasta ayer, comprendía la Plaza de Santo Domingo, la calle Maldonado y hasta San Blas. Añadió que estas acciones definitivamente afectan al turismo de la capital, pues los turistas huyen al ver el centro cercado.
De acuerdo a información de la Policía Nacional, este 27 de octubre cerca de 300 policías resguardarán el Centro Histórico, de los cuales 120 son antimotines.
