Con el 98.90% de las actas procesadas, hasta las 23:00 de este lunes 8 de febrero, el candidato por la alianza UNES, Andrés Arauz, se ubica en primer lugar con 32,06%. En segundo lugar está el candidato por Pachakutik, Yaku Pérez, quien registra el 20,10% de los votos, mientras que Guillermo Lasso de la alianza Creo-PSC tiene hasta el momento el 19,50%.
El candidato a la presidencia Yaku Pérez acudió al centro de mando del Consejo Nacional Electoral (CNE), y desde las afueras se manifestó en contra de sus rivales en los comicios por un presunto fraude electoral. De acuerdo con el candidato, el porcentaje de votos a su favor no coincide con la cifra para asambleístas nacionales por su partido político con cerca de 15 puntos.
Por lo que Pérez exige la apertura de las urnas en la provincia del Guayas, Pichincha y Manabí. Mientras que autoridades del CNE, concluyen que la cifras preliminares corresponden a un empate técnico entre los candidatos Guillermo Lasso y Yaku Pérez.
Ante las dudas manifestadas, mediante una rueda de prensa Diana Atamaint, presidenta del CNE, hizo un llamado a los partidos políticos para acudir a un reconteo de votos en el caso de ser necesario, siguiendo todo el procedimiento legal. Sin embargo, las organizaciones indígenas a favor de Yaku Pérez, no están convencidas y advierten movilizaciones hasta oficializar las cifras a favor del presidenciable.
El sector de extrema derecha se ha visto fuertemente golpeado por los resultados inesperados, puesto a que las encuestas realizadas semanas previas a la jornada electoral, demostraban una segunda vuelta liderada por el correísmo y la oposición, representada por la alianza entre CREO y el partido Social Cristiano. Así lo indicó Mauro Andino, especialista en derecho electoral, durante su entrevista en el programa «A Primera Hora», transmitido por Radio Majestad.
Andino señaló que, ante la evidencia esta fuerte pugna entre partidos hacia la pelea contra el correísmo en la segunda vuelta, el control electoral sería clave para definir el aspirante al segundo puesto de las elecciones. Debido a que, quien tenga las copias de las actas de escrutinio, podría impugnar u objetar en primer lugar hacia las juntas provinciales electorales, posteriormente en serie administrativa ante en Consejo Nacional Electoral (CNE).
Y de no verse satisfecho con los resultados numéricos, se podría presentar un recurso subjetivo contencioso electoral ante el Tribunal Contencioso Electoral (TCE), de acuerdo con el Código de la Democracia y según lo anunciado por el especialista. Sin embargo, recalcó que, los inconvenientes para este proceso surgen gracias a las actas rezagadas, puesto a que estas son entregadas a los miembros de las juntas receptoras del voto, que en ciertas ocasiones adolecen de la firma de algún integrante.
Según Andino, el artículo 138 del Código de la Democracia establece que, la junta electoral puede disponer que se verifique el número de sufragios de una urna en 3 casos. Pues si el acta fue rechazada por el sistema informático de escrutinios, si falta la firma del Presidente o Secretario de la junta receptora del voto en el documento, ó en el caso de que alguno de los sujetos políticos tiene la copia del acta de escrutinio para poder justificar algún tipo de inconsistencia en los resultados presentados por el CNE.
Adicional mencionó que, el CNE actuó de forma irresponsable al momento de informar los primeros resultados de las elecciones, puesto a que, días anteriores la directora de estadística anunció que si el resultado de sistema de conteo rápido presentaba un margen 1, 5% entre candidatos, se reservarían los datos y no se haría público hasta contar con un cifra oficial.
A pesar de ello, según recalca, la institución lo hace público y minutos después ratifica la información hacia otro movimiento político, por lo que actúa de forma adelantada, y genera confusión a la opinión pública y conflicto entre los actores políticos.
