El 30 de marzo del 2021 se estableció el artículo 2 del Acuerdo Interministerial 001. En él, se prohibió de forma expresa la venta de bebidas alcohólicas los días domingo. Una situación que, según hoteles, restaurantes y otros comercios, limitó sus actividades y redujo sus ingresos.
Posteriormente, con el cambio de mandatario en Ecuador, los ministros de Turismo, Niels Olsen, y de Gobierno, Cesar Monge, firmaron un nuevo acuerdo donde se autoriza la venta de bebidas alcohólicas los siete días de la semana. Así, los establecimientos regulados por estas entidades tienen la oportunidad de reactivar su economía y dinamizar a los sectores turístico, comercial y productivo del país.
Tras la decisión gubernamental, la intendenta de policía de Pichincha, Daniela Valarezo, explicó que durante el primer fin de semana con venta libre de alcohol, únicamente se clausuró a dos licorerías que no tenían el permiso para funcionar. El 29 y 30 de mayo, 40 funcionarios de la Intendencia y 400 oficiales de la Policía Nacional, participaron en operativos para controlar el expendio de bebidas alcohólicas en centros no autorizados.
La prohibición de vender bebidas alcohólicas se estableció en el año 2010, con el Acuerdo Ministerial 1470. Este determinó que los establecimientos registrados y regulados por el Ministerio de Turismo y Ministerio del Gobierno podrían expender licor en horarios fijados por la ley y solamente para acompañar una comida.
Para la directora de comunicación del ministerio de Turismo, Cristina Calderón, prohibir la venta de bebidas alcohólicas dentro de un establecimiento turístico un día domingo fue un problema para los diferentes establecimientos. Asegura que “el turista que llega hasta el país con motivos de diversión y entretenimiento, encuentra varias limitaciones y restricciones que no son de su agrado”.
Además, según Calderón, el Acuerdo Interministerial 001 contribuye a sincerar el sistema de alimentos y bebidas en el país. “Existió confusión en el consumidor frente a una serie de reglas y prejuicios que se ha dado antes, durante y después de la pandemia“, explicó la funcionaria del ministerio de Turismo.
En el caso de los establecimientos de alojamiento, esta medida ayuda en los ámbitos económico y turístico, como explica Estefany Rizo, gerente del hotel Mama Cuchara.
El hotel hizo grandes esfuerzos para retomar sus actividades durante esta pandemia. Crearon eventos al aire libre, paquetes de cocteles, cartas temáticas, menús de temporada los fines de semana; todo esto ayudó a la recuperación y reactivación del lugar.
A la par, la gerente explicó que se mantienen los protocolos de bioseguridad y distanciamiento social. Mientras el restaurante cumple con el aforo permitido para evitar la proliferación de contagios entre sus clientes.
Tanto empresarios como representantes del área consideran que, aunque esta medida no genere una recuperación total del sector turístico, la contribución de cada una de las personas al visitar y consumir genera fuentes de trabajo. Una acción que posibilita la reactivación de los establecimientos de alojamiento y consumo alimenticio en el país.