Tras diez meses de investigación, la Fiscalía General del Estado, junto con la Policía Nacional y la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (ARCSA), ejecutaron cinco allanamientos la madrugada de este viernes en la ciudad de Quito e Ibarra.

De ellos, se obtuvo como resultado la detención de cuatro personas por presunta participación en la comercialización, producción y fabricación de medicamentos falsificados.

Datos emitidos por la Fiscalía señalan que, como resultado de los operativos se incautaron 1´000.000 de medicamentos falsificados, cuyo valor rodea los USD 400.000. Además, se hallaron varios fármacos e insumos médicos caducados y adulterados; mismos que pretendían ser comercializados en farmacias y tiendas de las localidades mencionadas.

René Bruna, jefe de la Unidad de Delitos Aduaneros y cabeza de estos allanamientos, indicó que, gracias a investigaciones previas, se logró constatar que los medicamentos fueron importados en contrabando de Colombia y Perú, para luego almacenarlos en un domicilio ubicado en la capital.

«Estas personas se dedicaban a traer las medicinas y almacenarlas en unas cajas que no constaban con las codificaciones de calidad otorgadas por empresas farmacéuticas. De igual manera, se pudo constatar que los empaques llevaban fallas notorias de impresión y no contenían registros sanitarios», manifestó Bruna mediante una rueda de prensa.

De acuerdo con el jefe del operativo, el grupo delictivo se encargaba de comercializar medicinas como Buprex, Apronax, Buscapina y Terramicina. Aunque, a decir de Bruna, Terramicina corresponde a un fármaco cuya venta se prohíbe en el Ecuador desde el 2016.