Mediante los decretos 255 y 256, el presidente Guillermo Lasso realizó cambios en la cúpula militar y el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y Adolescentes Infractores (SNAI). Esto tras la masacre de este 12 y 13 de noviembre en la Penitenciaría del Litoral que dejó 62 reos asesinados.
Así, el primer mandatario aceptó la renuncia de Bolívar Garzón, quien estuvo al frente del SNAI por menos de 50 días, y trasladó su dirección al Centro de Inteligencia Estratégica; mismo que está liderado por Fausto Cobo.
Garzón fue nombrado como director de esta entidad el pasado 28 de septiembre en reemplazo a Cobo luego de que este pasara al frente del Centro de Inteligencia. Fecha en la que se registraron 118 reos asesinados en este mismo centro carcelario.
Además, en el decreto ejecutivo 256, emitido este 14 de noviembre, el primer mandatario designó al general Orlando Fuel como el nuevo jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. Fuel reemplazará al vicealmirante Jorge Cabrera, quien se desempeñó en este cargo desde el pasado 24 de mayo.
Anteriormente, Fuel se desempeñaba como jefe de Fuerza Terrestre, sin embargo, ahora ese cargo lo ocupará el general de brigada Luis Enrique Burbano. El nuevo director de la cúpula militar, tiene un diplomado superior en política, seguridad y democracia en la FLACSO y se ha capacitado en derechos humanos y economía de defensa.
Estas modificaciones se realizaron luego de que el Presidente se reuniera con los directivos de las Fuerzas Armadas, Policía Nacional y los ministros de Defensa y de Gobierno. La comandante de la Policía Nacional, Tannya Varela, no fue separada de su cargo.
