El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional resolvió este miércoles 25 de noviembre de 2020 multar económicamente a quienes usaron inadecuadamente el 9-1-1 durante el estado de excepción, que rigió tras el inicio de la pandemia por covid-19.
El ECU 911 identificó 1.497.387 registros de mal uso del servicio, aseguró Juan Zapata, Director del Servicio de Emergencias.
El uso indebido de la línea única para emergencias entorpece la atención de incidentes reales, desperdicia logística y tiempo para la asistencia ciudadana, por lo tanto obstaculiza la labor de salvar vidas pues no permite que las unidades de las entidades articuladas se movilicen de forma oportuna.
Piensen que ustedes están quitándole la opción de salvar una vida a un medico, por atender una llamada que es innecesaria, puntualizó el Ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos.
Según indicó Zapata, la primera vez que se incurra en esta falta, se sancionará con USD 100; en la segunda ocasión, se cobrarán USD 400 por la reincidencia; la tercera vez, la multa será de USD 100 (segunda infracción); la cuarta vez se cobrarán USD 400 (segunda reincidencia). La máxima sanción equivaldría a USD 1.000 (dos infracciones y dos reincidencias).
Este sistema de multas se ha pensado tomando en cuenta el comportamiento ciudadano, como ejemplo una sola persona de Quito, desde el número 099517230X, realizó 1.236 llamadas (con un promedio de 20 comunicaciones diarias).
El costo de una llamada indebida —que dura en promedio 1 minuto con 50 segundos— es de USD 2,56. En esta estimación se consideran aspectos de logística y tecnología que se deprecia, costos productivos y no productivos, devaluación de mobiliario y equipos, servicios básicos y telecomunicaciones que los asume el ECU 911.
Se estima que en la atención a llamadas falsas, el Estado ecuatoriano ha asumido USD 3.833.310 en pérdidas.
Se tiene proyectada una recaudación de USD 223.188.200 por multas de mal uso del 9-1-1 realizadas desde 790.655 líneas telefónicas durante el tiempo que duró el estado de excepción.
Las multas se cobrarán a través de la factura telefónica; se ejecutará un proceso sancionador con cuatro etapas y se realizará a través de una plataforma electrónica:
- 1) El ECU 911 verificará el número de llamadas de mal uso de la línea única 9-1-1.
- 2) La Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones (Arcotel) realizará la
recopilación de información de uso indebido del 9-1-1. - 3) La Arcotel ejecutará la gestión del cobro de las multas con las compañías de telefonía
fija o celular - 4) La Arcotel efectuará el registro electrónico de la infracción en la plataforma de Mintel.
- Para respaldar estas sanciones el COE Nacional emitió una resolución, en la que se dispuso al Ministerio de Salud y al Ministerio de Gobierno incorporar en el reglamento respectivo una sanción económica para las personas que de manera indebida utilicen los números de atención de emergencia 9-1-1 y/o 1-7-1 para llamadas que no constituyan una emergencia o cualquier tipo de llamada falsa.
El Mintel también estableció en dos acuerdos ministeriales los parámetros bajo los cuales se establece que un usuario cometió una infracción.