Redacción: María Emilia Vaca
Las redes sociales se han convertido en un medio de expresión y manifestación de la sociedad. Su inmediatez y gran alcance ha permitido informar a tiempo real y generar tendencia sin ataduras.
El pasado 8 de octubre, el periodista Juan Sarmiento, fue sentenciado a 10 días de cárcel luego de ser enjuiciado por el gobernador de Napo, Patricio Espíndola. El Comunicador Social fue procesado debido a las críticas que realizó en contra de la gestión del funcionario público durante la pandemia. Los cuestionamientos se realizaron a través de las redes sociales con palabras ofensivas como “bazofia humana” e “imbécil”.
El Código Orgánico Integral Penal establece que, con temas relacionados al mal uso de las expresiones en redes sociales, la víctima está en su derecho de demanda y el juez encargado podrá establecer una sentencia hasta de 40 días de privación de libertad e incluso actividades obligatorias de trabajo comunitario.
A partir del año 2014 la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha sugerido al Ecuador que elimine esta clase de tipificaciones penales ya que vulneran la libertad de expresión. Esta normativa legal genera límites a la libertad de expresión, indicó Paulina Mogrovejo, jurista especialista en comunicación y ex integrante del Consejo de Regulación y Desarrollo de la Información y Comunicación (CORDICOM), en el programa “A primera hora” transmitido por Radio Majestad.
Mogrovejo aseguró también que, la sentencia en contra del Periodista mencionado, es desproporcional y representa un abuso por parte del funcionario, dado a que primero se debe tomar en cuenta un análisis acerca de los límites entre libertad de expresión y la doctrina de los derechos humanos.