La Romería de la Virgen del Quinche, en la que año a año miles de fieles participan con largas caminatas desde Quito hasta la parroquia nororiental, fue suspendida este año para evitar aglomeraciones y contagios de COVID 19.
También la iglesia y el Campo Mariano se cerraron. Las misas y vigilia se transmitieron por radio y televisión.
En su lugar, la estatua de la Virgen sobrevoló la capital en un helicóptero de la Policía Nacional. El arzobispo de la ciudad acompañó el recorrido.
A pesar de la prohibición, el subintendente de Pichincha, Cristian Paredes, dio a conocer que el viernes 13 impidieron el transito de alrededor de 20 personas que se dirigían al santuario.
Como resultado de los controles en las zonas aledañas a El Quinche, se suspendieron dos fiestas. En una había unas 60 personas y 80 en la otra.
También se realizaron operativos de control del orden y cumplimiento de medidas sanitarias en los sectores de Cayambe, La Mena, Iñaquito San Antonio y Rumiñahui.
Desde la Agencia Metropolitana de Control, se informó de otro operativo en el que se encontró a personas consumiendo licro artesanal a los pies del santuario.
También se intervino un partido deportivo de Vóley, donde se encontraban al menos 50 personas consumiendo licor. Se retiró a las personas, se clausuró la cancha y se sancionó a los infractores.
