¿Quieres salir a un lugar tranquilo lleno de paz y desconectarte del ruido de la gran ciudad?
En la provincia de Chimborazo, a tres horas de la ciudad de Riobamba y una hora del cantón Alausí, se encuentra la parroquia de Achupallas, un pueblo mágico de paisajes y naturaleza única.
Con una población de 12.000 habitantes, en su mayoría adultos mayores, indígenas y mestizos, se caracteriza por su tranquilidad, aire puro y montañas en sus alrededores, es reconocida por la hospitalidad y generosidad de su gente.
La agricultura, la ganadería, la elaboración de quesos, pan y cholas (pan con dulce relleno de panela), además de su gastronomía inigualable, son sus principales actividades económicas.
Como anécdota, cuando un viajero llega hasta este lugar degusta de un tradicional caldo de gallina, papas con cuy, chicha de jora. O si llega con su familia, cocinar un chancho y prepararlo para una rica fritada, hornado, es una opción extraordinaria. Las galletas de mandarina, arepas, entre otros manajes, están a disposición de los más golosos.
Un lugar para la aventura
Si le gusta la aventura, Achupallas es para usted. Qhapac Ñan o Camino del Inca, es uno de los principales tramos por recorrer. Esta fortaleza incaica atraviesa los páramos de las Tres Cruces, la laguna de Culebrillas, y las ruinas de Ingapirca en la provincia del Cañar.
Es una ruta exigente con un recorrido que puede durar 2 días y medio, en los que disfrutará de hermosos y diversos paisajes. Este camino se lo puede realizar a caballo o caminando.
Las rutas están diseñadas para la caminata, ya que son recorridos ricos en paisajes y experiencias únicas, y disfrutar de una experiencia emocionante alejada de las grandes ciudades.
Si usted quiere visitar Achupallas y disfrutar de sus paisajes, lleve ropa cómoda, una chompa o rompe vientos, guantes, gorro y las ganas de conocer un nuevo lugar escondido, dentro del Ecuador.
