Aunque el pasado 3 de junio el Concejo Metropolitano de Quito aprobara la remoción del alcalde Jorge Yunda, con 14 votos a favor, todavía se debe esperar el pronunciamiento del Tribunal Contencioso Electoral (TCE). El burgomaestre presentará un recurso de consulta para que el organismo revise que se haya cumplido el debido proceso para su remoción.
Mientras tanto, el vicealcalde de Quito, Santiago Guarderas, aseguró en entrevista con radio majestad, que la remoción del alcalde cumplió con lo especificado en el literal g del Código Orgánico de Ordenamiento Territorial (COOTAD), el cual establece:
g) Incumplir con las disposiciones establecidas en la legislación para garantizar el ejercicio del derecho a la participación ciudadana en la gestión del respectivo gobierno autónomo descentralizado.
“El no haber presentado a la máxima autoridad de participación ciudadana que es la asamblea de Quito, los informes sobre el presupuesto sobre los planes para los ejercicios económicos de 2019 y 2020” fue la razón por la que vicealcalde votó a favor de la remoción.
Por su parte, Jorge Yunda ha refutado estos argumentos y ha cuestionado el proceso que fue liderado por Santiago Guarderas, quién en caso de ratificarse la remoción de Yunda, sería el nuevo burgomaestre de la ciudad.
Ante esas declaraciones, Guarderas afirmó que “si el legislador no quiso tener esta situación, debió entonces decir que se excluía también en estos casos al vicealcalde. No lo hizo y, por consiguiente, estableció como debía tramitarse tanto la comisión de mesa como el Concejo metropolitano”.
Por otro lado, ante la posibilidad de que el TCE invalide la decisión del Concejo Metropolitano, Carolina Moreno, representante del Frente de Profesionales de Quito que logró la remoción, asegura “el alcalde debería dejar de desgastar a la ciudad, ya vimos que en dos años que tuvo la oportunidad, no ha trabajado correctamente y alargar esto me parece injusto con la ciudad”. Sin embargo, no descarta pedir la revocatoria, si no lo hace primero el colectivo Quito Unido.
Mientras se espera el pronunciamiento del TCE, el pasado 3 de junio, el vicealcalde Guarderas advirtió a los funcionarios del Municipio sobre contratos o pagos de última hora que se realicen dentro del marco de esta posible transición. Además, acotó que no dudará en acudir a contraloría y fiscalía en caso de que se incurran en actos ilegales.
Ahora, lo que resta es esperar que se cumpla el plazo de 10 días para que el Tribunal Contencioso Electoral se pronuncie, y definir si Jorge Yunda continúa al mando del cabildo o si Guarderas toma su lugar.