Ante las intensas lluvias que han afectado a la región Litoral, el Ministerio de Educación ha implementado 187 planes de continuidad educativa para evitar la interrupción del proceso de aprendizaje. Estas medidas buscan proteger a los estudiantes y garantizar la educación a pesar de las adversas condiciones climáticas. Entre las acciones clave se incluyen la activación de alertas tempranas mediante el Inocar y el Inamhi, que advertirán sobre lluvias intensas y oleajes peligrosos.
Además, se han desarrollado estrategias pedagógicas para que los alumnos puedan continuar sus estudios desde casa. Se distribuirán fichas y recursos educativos a distancia, permitiendo que los estudiantes mantengan el ritmo escolar sin necesidad de exponerse a situaciones de riesgo. La ministra de Educación, Alegría Crespo, destacó que esta iniciativa representa un avance significativo para la educación en situaciones de emergencia.
De los 187 planes activados, 28 son de carácter temporal, lo que significa que los estudiantes solo asistirán a los centros educativos para rendir exámenes. Esta medida responde a los reclamos de padres de familia, quienes han denunciado el mal estado de algunas escuelas, lo que representa un peligro para alumnos y docentes en esta temporada de lluvias.
Si bien la iniciativa busca proteger a la comunidad educativa, también genera inquietud entre algunos padres y estudiantes. La experiencia previa de las clases a distancia dejó desafíos en la calidad del aprendizaje, y muchos temen que esta modalidad vuelva a generar dificultades. No obstante, el Ministerio de Educación asegura que estos planes permitirán enfrentar la crisis sin afectar el derecho a la educación.
