La ley humanitaria no se cumplió para todos. Así lo aseguró Édison Puebla, representante de los médicos posgradistas, en una entrevista en A primera hora transmitida por Radio Majestad.
Entre las disposiciones se determina el reconocimiento los derechos y el trabajo de los médicos posgradistas, autofinanciados y becarios, que presten sus servicios en los hospitales pertenecientes a la Red Integral Pública de Salud (RIPS) y la red complementaria.
Puebla explica que 98 profesionales de la ciudad de Quito quedaron fuera de sus sitios de trabajo a inicios de 2021, durante la pandemia. “En enero los médicos posgradistas que no teníamos contrato todavía fuimos sacados de las casas de Salud. No solo no se nos paga, sino que también se trunca nuestra formación”, comenta.
En el país existen mil médicos posgradistas. En la ciudad de Quito son alrededor de 400 y, de esa cifra, aproximadamente 100 galenos fueron separados de sus puestos de trabajo. Para Édison Puebla, esta situación no solo los afecta a ellos, sino también a sus compañeros que están trabajando normalmente. “Son cuatro médicos, se va uno ya que no constaba de un contrato y el trabajo se duplica para los que permanecen”, explica.
Apenas se posicionó el nuevo Gobierno, el grupo de posgradistas afectado tuvo un acercamiento con la representante zonal 9 en la ciudad de Quito. Allí les explicaron que están al tanto de la situación pero que, por el momento, no tienen una respuesta.
A decir de Puebla, los médicos posgradistas están dispuestos a dar todo por sus pacientes; lo único que exigen es un reconocimiento por el Gobierno para que ellos puedan tener la seguridad de que el trabajo será estable y que recibirán una remuneración justa por su labor.
Por ello hacen un llamado al vicepresidente, Alfredo Borrero, quien también es médico, y piden que tome en cuenta su petición.