La Fiscalía General del Estado informó que los cuerpos encontrados en una zona agreste de Taura, cantón Naranjal, aún no han sido identificados. A pesar de la circulación de rumores este domingo 29 de diciembre sobre el posible reconocimiento de dos de los cadáveres mediante brackets y huellas dactilares, la institución recalcó que los resultados finales de las pericias no están disponibles.
Estos cuerpos están relacionados con la desaparición de cuatro menores en Guayaquil el pasado 8 de diciembre, quienes fueron vistos por última vez en una patrulla militar cerca de un centro comercial antes de ser llevados hacia Taura. Desde entonces, no se tiene noticias certeras sobre su paradero. La Fiscalía hizo un llamado a la ciudadanía y a los medios a manejar la información con responsabilidad y esperar los informes definitivos que serán entregados directamente a las familias.
El abogado de las familias, Fernando Bastidas, aclaró en redes sociales que los análisis forenses aún no han concluido y que no se proporcionaron los datos odontológicos requeridos para avanzar en la identificación debido a que el odontólogo no estaba disponible. Mientras tanto, los familiares se sometieron a exámenes de ADN para cotejar los resultados con los restos hallados.
La desaparición ha sido calificada como «forzada» por una jueza, atribuyendo responsabilidad al Estado y señalando que los 16 militares involucrados no siguieron los protocolos adecuados. Mientras la investigación sigue, las familias de Ismael, Josué, Saúl y Steven enfrentan la incertidumbre, esperando respuestas definitivas que puedan aliviar su angustia.
