Irene Tobar ha logrado posicionarse como una de las principales referentes del deporte femenino ecuatoriano. Con una destacada trayectoria en Ecuador y Colombia, sorprendió al llegar a Arabia Saudita, un destino poco común para las futbolistas de su país. “Mi plan inicial era irme a Estados Unidos, pero sentí que Dios me llevó aquí con un propósito”, afirmó Irene, quien aceptó el desafío de jugar en una cultura completamente distinta.
El fútbol femenino en Arabia Saudita está en pleno desarrollo, y el país está invirtiendo significativamente en este deporte. Irene describe a la liga saudí como un proyecto ambicioso con instalaciones de primer nivel y partidos que ya cuentan con transmisiones profesionales. Además, la presencia de figuras internacionales en la liga masculina, como Cristiano Ronaldo y Karim Benzema, impulsa el interés por el fútbol en general. Sin embargo, las diferencias culturales son notorias: mientras las jugadoras locales deben seguir reglas estrictas, Irene tiene mayor libertad debido a su condición de extranjera.
La adaptación al clima extremo de Arabia Saudita ha sido uno de los mayores retos para Irene. «Entrenamos en las noches porque las temperaturas durante el día son muy altas», comentó. A pesar de las dificultades, la futbolista se esfuerza por integrarse plenamente, aprendiendo árabe para complementar su comunicación en inglés con el equipo y el cuerpo técnico. Este proceso de adaptación refleja su compromiso con el deporte y su determinación de aprovechar esta experiencia única.
A través de su camino, Irene se ha convertido en una inspiración para las jóvenes ecuatorianas que sueñan con jugar al fútbol profesional. “Represento a Ecuador y a todas esas niñas que tienen sueños. Mi mensaje es que no se den por vencidas”, expresó con orgullo.