A partir del 26 de julio, las clínicas de diálisis han anunciado que dejarán de brindar tratamientos a sus pacientes debido a la falta de insumos y la ausencia de pagos por parte del Ministerio de Salud Pública (MSP), que mantiene deudas con los proveedores.
Cristina Freire, vocera de la Asociación de Centros de Diálisis del Ecuador, explicó que esta medida afectará a las provincias de Guayas, Los Ríos, Santa Elena, Manabí, Santo Domingo, Pichincha, Tungurahua, Loja, y El Oro, agregó que han solicitado al gobierno al menos el 15% de la deuda total en un plazo de quince días y el resto en pagos mensuales programados, pero no han recibido respuesta satisfactoria.
Ante la situación el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) ha anunciado que, en los próximos días, realizará un pago de 6.1 millones de dólares a las clínicas de diálisis con el fin de garantizar la continuidad de los servicios renales a los pacientes. Esta acción busca solucionar las demoras en los pagos que han afectado a estas entidades, asegurando un flujo constante de recursos.
Además, el IESS ha planificado realizar pagos periódicos durante los próximos meses por un total de 30 millones de dólares, correspondientes a auditorías retrasadas de los meses de junio, julio y agosto de 2023. Mientras tanto, se implementará un plan de emergencia de auditoría para la diálisis, hasta que se firme un nuevo contrato de auditoría externa.
