En un rincón de Andalucía, la pasión por el deporte y la excelencia se fusionan en la historia de los hermanos Boris. Ariel y Néstor, de 12 y 15 años respectivamente, no solo destacan en el tenis de mesa, sino que también combinan su rutina diaria entre las aulas y las competencias de alto nivel. Ambos han logrado más de 200 medallas, dejando huella en cada torneo en el que participan.
Este éxito no es casualidad, sino el resultado de su disciplina y el incondicional apoyo de su familia.Ariel Boris, con solo 12 años, ya se consagró campeón en la categoría Sub-19 del Gran Prix Nacional y en la Copa Mitad del Mundo 2023. Además, obtuvo la medalla de oro en el circuito mundial de la ITTF. “Al principio solo quería jugar con otros niños, pero al entrenar, me enamoré del tenis de mesa. Ahora soy campeón”, cuenta Ariel con la humildad de un verdadero campeón.
Por su parte, Néstor Boris, a sus 15 años, sigue los pasos de su hermano. Ha sido campeón del Gran Prix Nacional en la categoría Sub-13 y obtuvo el primer lugar en la Copa Mitad del Mundo 2023. Su talento lo llevó a destacar en el circuito mundial de la ITTF, ganando la medalla de oro en la categoría Sub-11. “Mi mayor alegría es ver a mis hijos triunfar”, confiesa Boris Villavicencio, el padre, quien descubrió el talento de sus hijos por casualidad al intentar inscribirlos en un vacacional de fútbol.
El camino hacia el éxito no ha sido fácil. La familia Boris ha tenido que enfrentar grandes sacrificios económicos para costear entrenamientos, indumentaria y viajes al extranjero. Sin embargo, gracias al apoyo de empresas comprometidas como Andalucía, los sueños de estos jóvenes talentos siguen vivos. “Ser deportista en Ecuador es costoso, pero con el respaldo de Andalucía, podemos soñar en grande y aspirar a unas Olimpiadas”, concluye Boris Villavicencio, quien sabe que el esfuerzo vale la pena cuando ve a sus hijos subir al podio, medalla tras medalla.