La Unidad de Bienestar Animal (UBA) atiende diariamente denuncias de mala tenencia, maltrato animal, rescate animales de compañía que han sido víctimas de accidentes de tráfico, o enfermedades graves, dentro de la capital. Sin embargo, muchos de ellos llegan a los Centros de Atención Veterinaria, Rescate y Acogida Temporal (CAVRAT), en condiciones que, muchas veces, son irreversibles y les provocan un dolor y sufrimiento.
Es por eso que, el año 2022 de los 3.670 ingresados a los CAVRAT, la UBA decidió aplicar la eutanasia al 21% de animales, mientras que, en el año 2023 de los 6.855 animales que ingresaron a la UBA, al 20% se les aplicó la eutanasia. De acuerdo a la entidad municipal esta decisión se tomó como un acto de compasión a favor de los peluditos.
La entidad indicó en exclusivo a TU Voz Tv que, la eutanasia se aplicó específicamente a peluditos que se encontraban en un estado de sufrimiento permanente, ya sea: físico, fisiológico y psicológico. Es decir, a animales víctimas de atropellamientos, politraumatizados, con tumores en estado avanzado e incurable, con infecciones generalizadas e intratables, con mutilaciones múltiples de órganos y extremidades, en estado agónico, en estado de coma irreversible, y demás situaciones médicas irreversibles que provocan dolor y padecimiento a los animales.
Causales de eutanasia
Durante el año 2024, este porcentaje ha mostrado una tendencia estable al recibir las siguientes causales para aplicar este método:
- 50,7%: Cuando los animales no pudieron ser tratados por tener una enfermedad terminal o incurable.
- 43,9 % al recibir animales en un estado de sufrimiento permanente: físico, fisiológico y psicológico.
- 4,5% al recibir animales declarados como perros peligrosos según la Sección VIII Art. 3332 del Código Municipal.
- 0,8% al recibir animales como parte de una jauría de asilvestrados.
- 0.1% a animales portadores de una zoonosis grave que podría constituir un riesgo para la salud pública.
Asimismo, la UBA destaca que, estas acciones, (aplicación de la eutanasia), están alineadas con los estándares de la International Companion Animal Management Coalition (ICAM) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), que contemplan una estrategia integral para el control de poblaciones de animales que incluye legislación, educación, registro e identificación, esterilización, centros de reubicación, vacunación, desparasitación y eutanasia bajo estrictos parámetros de bienestar animal.
