El nuevo mercado de San Roque celebra sus 40 años de reubicación. Durante el mes de agosto, la Agencia de Coordinación Distrital del Comercio de Quito (ACDC) aseguró que los clientes podrán beneficiarse de descuentos y rifas.
Los viernes y sábados de este mes, los compradores recibirán raspaditas por compras mayores a 10 dólares. Con los boletos podrán ganar premios y canjearlos en ese momento en los locales. Además, se realizará el sorteo de una canasta de compras, una pierna de chancho, entre otras recompensas.
Ubicado en las faldas del volcán Pichincha, San Roque se ha convertido en el segundo hogar de tres mil comerciantes, quienes inician su jornada a las 3h00. Los productos que llegan de todo el país, permiten abastecer al 35% de quiteños. Desde las 5h00, los siete días de la semana, los ciudadanos pueden acercase a este histórico mercado para conseguir productos frescos a buen precio.
Durante el evento de conmemoración, fueron reconocidas las fundadoras de este nuevo sitio de comercio: Fanny Masapanta, Anita Casillas y Carmen Guachamín. Las tres mujeres trabajan en el mercado desde 1981.
Un mercado colonial
Durante la época de la Colonia, en el barrio San Roque se ubicó uno de los primeros tianguis o mercadillos, de Quito. Al sector llegaban varios comerciantes indígenas con frutas, legumbres, granos, carnes y otros alimentos.
El primer mercado fue inaugurado el 8 de noviembre de 1951. Se ubicaba frente a la Iglesia de San Roque en las calles Chimborazo y Rocafuerte. Años después, el 10 de agosto de 1981, fue reubicado al sector del ex colegio Central Técnico (antigua Escuela de Artes y Oficios), donde se encuentra actualmente.
Este barrio ha conservado su historicidad y forma de vida basada en el comercio de alimentos. Dado que, el 40% de los trabajadores son indígenas, se ha convertido en una cuna de preservación de costumbres y tradiciones ancestrales.
