Camila Muñoz
El presidente de la República, Guillermo Lasso anunció la suspensión de la jornada laboral a nivel nacional el día lunes 6 de febrero de 2023. Esto se debe a la ardua labor que tendrán los miembros de las mesas de la junta receptora el día domingo 5 de febrero. El primer mandatario anunció esta medida mediante el Decreto N° 655, decisión que responde al requerimiento emitido por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Según datos estadísticos emitidos por varios simulacros realizados por el Consejo, se estima que el tiempo empleado para contar los votos sea alrededor de seis horas, esto mediante el método de escrutinio. Además, alrededor de 4.013 instituciones educativas son recintos electorales y al día después de las elecciones deben ser adecuadas nuevamente para el retorno de los estudiantes a clases.
Pero no todo es color de rosas, este día de descanso será recuperable, tanto en instituciones públicas como en privadas. La suspensión de la jornada laboral en el sector público se recuperará empleando una hora adicional durante ocho días laborables. Para el sector privado, la manera de recuperación será mediante el acuerdo mutuo entre los empleadores y trabajadores o tienen la opción de acogerse al método de recuperación de las instituciones públicas.
El 25 de enero de 2023, el Pleno del Consejo Nacional Electoral (CNE) solicitó al Ejecutivo que se acepte como día de descanso el lunes 6 de febrero, luego de la jornada de elecciones que vivirá el país. La presidenta del CNE, Diana Atamaint, requirió la colaboración con este requerimiento al primer mandatario. Esta petición se da puesto que las personas que están designadas a permanecer en las mesas de votación tendrán una jordana larga para recibir y contabilizar los votos.
Durante la suspensión de la jornada laboral, las autoridades han indicado que, se garantiza la disposición de los servicios públicos básicos como: salud, bomberos, aeropuertos, terminales terrestres, aéreos, marítimos y fluviales, además de servicios bancarios. Por tanto, las autoridades deben limitar el número de personal para atender a las personas que lo necesiten.
