Se firmó el Pacto Violeta, como parte del proyecto Turismo Violeta, que lleva adelante el ministerio con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Universidad San Francisco de Quito. De esta manera, el país se convierte en pionero en la región en desarrollar lineamientos para un turismo con enfoque de género.
Dentro del pilotaje del proyecto de Turismo Violeta se trabajó con tres Centros de Turismo Comunitario de las regiones Costa (Dos Mangas-Santa Elena), Andes (La Moya-Chimborazo) y Amazonía (Sinchi Warmi-Tena), con el acompañamiento de agencias turísticas de Guayaquil y Quito que viajaron a conocer la oferta que se está trabajando en los Centros de Turismo Comunitario a fin de poder presentar los productos a sus clientes.
Durante su intervención, el ministro de Turismo, Niels Olsen resaltó que, para la industria del turismo, el aporte de la mujer es sumamente significativo, sobre todo si se toma en cuenta que el 54% del total de trabajadores del sector son mujeres, razón por la cual este proyecto busca eliminar las brechas de género que existen en la sociedad.
Silvana Ramírez, viceministra de Turismo, explicó que la cooperación técnica realizada entre el BID y el Ministerio de Turismo es una apuesta en la aplicación del enfoque de género para el desarrollo turístico desde varios aspectos como la producción y el consumo responsable, la seguridad, la gestión sostenible, la inclusión territorial, la cultura organizacional, la formación y educación, y el bienestar y la salud de las mujeres.
Por su parte, Paola Flores, ministra de la Mujer y Derechos Humanos enfatizó que es una gran responsabilidad para el país ser pionero en este tipo de turismo, y el reconocer la importancia de distintos roles de la mujer en el sector.
El proyecto cuenta con varios objetivos entre los que se destaca: construir organizaciones sostenibles que impulsen el liderazgo femenino; promover turismos y empleos dignos en entornos seguros y libres de violencia; atraer turistas responsables que promuevan la igualdad; promover prácticas sostenibles, equitativas para ambos géneros y generar oportunidades para proyectos empresariales en turismo.
