El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció una sorpresiva pausa de 90 días en la aplicación de aranceles para países que, como Ecuador, no han tomado represalias comerciales frente a su nueva política arancelaria. Esta medida representa un alivio temporal para las exportaciones ecuatorianas, que venían enfrentando la amenaza de mayores gravámenes en uno de sus principales mercados.
La decisión fue publicada este miércoles 9 de abril en la red social Truth Social, donde Trump aseguró que más de 75 países han optado por mantener canales de negociación abiertos con Washington en lugar de responder con medidas similares. En consecuencia, se implementará una reducción inmediata del 10 % en los aranceles recíprocos durante el periodo de suspensión.
Ecuador, que mantiene una balanza comercial sensible con EE.UU., podría beneficiarse significativamente en sectores como el agrícola, el florícola y el pesquero. No obstante, esta decisión es provisional y está sujeta a los avances que se logren en las mesas de negociación bilateral.
Mientras tanto, países como China y bloques como la Unión Europea enfrentarán un endurecimiento de las tarifas, con aranceles que en algunos casos alcanzan el 20 %. La estrategia de Trump reconfigura el mapa del comercio global, y Ecuador deberá aprovechar esta ventana para asegurar condiciones más estables y permanentes para sus exportaciones.