Con la aprobación del retorno a clases presenciales en escuelas y colegios, a nivel nacional, 4,3 millones de estudiantes regresarán de manera progresiva a las aulas. Este 22 de noviembre comenzará el primer grupo que constan de estudiantes de terceros de bachillerato técnico, rural e insular.
Aleida Ullaguari, madre de familia de una joven que se encuentra cursando el décimo año de básica en el colegio Simón Bolívar, explica que “prácticamente han sido dos años de retraso educativo, existen materias principales donde no hay un profesor”. Su preocupación es que la institución no le ha comunicado si su hija regresará o no este 7 de diciembre a las clases presenciales.
En total 8.428 instituciones educativas se encuentran en clases semipresenciales desde el pasado 7 de junio del presente año, con la aprobación del COE Nacional.
Para, Deysi León, docente de la Unidad Educativa Camilo Gallegos Toledo, de la ciudad de Riobamba, es una buena oportunidad para que los niños aprendan mejor, ya que la educación estaba en retroceso.
De los 35 estudiantes que enseñaba solo 25 se conectaban, pues los 10 restantes, por el hecho de vivir en un sector rural, no contaban con internet en sus hogares.
En cuanto a la vacunación, la docente explica que el 80% de los estudiantes se encuentran vacunados, pero el 20% no, debido a sus creencias religiosas para no recibir la vacuna. Es por ello que, se trabajará con este último grupo de estudiantes mediante la plataforma teams, para que no exista riesgo de contagio entre compañeros.
Según el presidente del Colegio de Médicos de Pichincha, Víctor Álvarez, a nivel nacional el 90% de los pacientes que más ingresan a las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), son adultos que no son se han vacunado. Mientras que el 10% se han aplicado solo una dosis.
En el caso de los niños presentan una sintomatología moderada que no necesitan hospitalización. Por ello opina que regresar a las clases ayudará a la salud mental de los más pequeños. “Hay que hacer protocolos estrictos de bioseguridad, mediante la coordinación entre padres de familia y docentes con el objetivo de disminuir el riesgo de contagios” menciona.
A pesar de que en los últimos feriados hemos tenido gran movilización de gente, no hubo un rebrote de la enfermedad como en épocas anteriores, indica Christopher Salas, médico residente en emergencia del Hospital de IESS- Cotocollao. Por lo tanto, considera que es correcto que los niños regresen a clases presenciales, porque en este año lo que se ha visto es un retraso en su formación. En cuanto a los más pequeños, recalca que es importante que retornen conforme avance la vacunación.
En el caso de Mirian Jaramillo, madre de familia de una pequeña de séptimo de básica de la Unidad Educativa San Antonio de Padua, afirma que le preocupa que su hija se contagie en la institución ya que aún no todos los compañeros cuentan con la dosis.
Además, prefiere que su hija reciba clases en línea, ya que la institución no le ha informado cuáles serán las medidas de bioseguridad que se van mantener al momento de regresar a clases en enero.
Por ello el Ministerio de Educación ha creado dos instituciones educativas fiscales, a distancia, que ofrecerán clases 100 % virtuales para aquellos estudiantes que no puedan o no quieran regresar a las instituciones educativas. La primera será para el régimen Costa y otra funcionará para la Sierra y Amazonía.
