En las ciudades donde el color del semáforo es amarillo, las clínicas odontológicas ya han abierto sus puertas.
Los odontólogos están dentro del grupo de profesionales más expuestos a contraer coronavirus, ya que trabajan directamente en la boca y es ahí por donde existe el mayor contagio. Existe un gran riesgo tanto para el médico como para el paciente.
La enfermedad se propaga principalmente de persona a persona a través de las gotículas que salen despedidas de la nariz o la boca de una persona infectada al toser, estornudar o hablar.
En una cita médica en el momento que se enciende la jeringa de aire se generan las llamadas gotitas de flügge (las mismas que se esparcen al hablar, toser o estornudar) que van al ambiente o pueden llegar al doctor.
Profesionales de la salud odontológica se han reunido para reforzar los protocolos y procesos de atención a los pacientes, aún más estrictos de los que antes ya se manejaban.
La agrupación denominada “Odontólogos Unidos” elaboró un documento enfocado a evitar el contagio de covid19 tanto a los usuarios como del personal médico.
Dentro del protocolo se establecen varias medidas de bioseguridad:
- Transporte privado individual para el personal.
- Equipos de protección personal para todos los trabajadores.
- Protocolo de revisión y chequeo de síntomas previo a ingresar a las Clínicas Odontológicas.
- Gestión comercial y ventas en línea, únicamente la atención médica odontológica será presencial.
- Activación de protocolo de distanciamiento.
- Manejo adecuado de desechos.
Estas medidas están sustentadas en las normativas y guías establecidas por la Organización Mundial de la Salud, el Ministerio de Salud Pública, y la Asociación Dental Americana.
Odontocenter es una de las clínicas que ya ha abierto sus puertas en Quito y ha implementado estas medidas de bioseguridad. Los controles son estrictos al atender a sus pacientes.
Los Servicios Médicos Odontológicos manejan más de 20.000 plazas de trabajo a nivel nacional.