El proceso de admisión a la educación superior pública en Ecuador contempla puntajes adicionales para postulantes que pertenecen a grupos prioritarios, según lo establece el artículo 49 del Reglamento del Sistema Nacional de Nivelación y Admisión. Esta medida busca reducir desigualdades históricas y facilitar el acceso a quienes más lo necesitan.
Entre los beneficiarios están las personas en situación de pobreza, que reciben 15 puntos adicionales, y quienes estudiaron en zonas rurales, con 5 puntos más. También se otorgan 10 puntos por territorialidad a los aspirantes que viven en parroquias con altos índices de pobreza, conforme a los datos del Registro Social.
Un grupo clave dentro de esta acción afirmativa son las personas en condición de vulnerabilidad, quienes pueden recibir entre 5 y 35 puntos, según el caso. Aquí se incluye a personas con discapacidad, personas con enfermedades catastróficas, víctimas de violencia de género, migrantes retornados, hijos de víctimas de femicidio, personas que vivieron en casas de acogida, y también a quienes reciben el Bono Joaquín Gallegos Lara o son sus cuidadores. Este bono, otorgado por el MIES, es una medida de acción afirmativa destinada a apoyar a personas con discapacidad severa y sus familias.
Adicionalmente, los aspirantes que pertenecen a pueblos y nacionalidades indígenas, afroecuatorianos o montuvios reciben 10 puntos extra. Estos beneficios no solo reconocen situaciones de vulnerabilidad, sino que también promueven una educación inclusiva, equitativa y con enfoque social. La Senescyt cruza información con otras entidades para garantizar un proceso justo y transparente.
