Un operativo de control intensivo realizado en el sector de Solanda permitió el rescate de un cachorro tipo Pitbull que permanecía dentro de una jaula en condiciones inadecuadas. La intervención se activó tras una denuncia ciudadana, lo que permitió que el equipo de control acudiera al sitio en coordinación con la Agencia Metropolitana de Control.
Al llegar, se constató que el cachorro estaba recluido en un espacio reducido que impedía su comportamiento normal. Tras evaluar la situación, se levantó un informe de flagrancia para dar inicio al respectivo procedimiento administrativo sancionador. El objetivo: garantizar la protección y el bienestar del animal afectado.
Durante la inspección, un familiar del tutor del perro reaccionó de forma violenta e intentó entorpecer el trabajo de los equipos de control. Sin embargo, gracias al apoyo del Cuerpo de Agentes de Control y de la Policía Nacional, la situación pudo ser controlada y el operativo se desarrolló conforme a los protocolos establecidos.
Las autoridades recuerdan que, si una persona no puede garantizar condiciones seguras, dignas y respetuosas para un animal de compañía, es mejor no tenerlo. Tanto el Municipio de Quito como la Unidad de Bienestar Animal reiteran que el maltrato y la negligencia hacia los animales no serán tolerados.