En Ecuador, los niños y niñas huérfanos por femicidio enfrentan una dura realidad, el 55% de los menores no reciben atención en salud mental. Así lo revela un estudio de UNICEF, que advierte sobre el abandono psicológico que sufren estos menores tras la pérdida violenta de sus madres. A pesar de atravesar una de las experiencias más traumáticas de sus vidas, la mayoría no accede a apoyo profesional, lo que pone en riesgo su bienestar emocional y su futuro. Sin intervención oportuna, el trauma no tratado puede derivar en ansiedad, depresión y dificultades para relacionarse con los demás.
El mismo estudio, que analizó 76 familias con 151 niños, niñas y adolescentes, muestra que el impacto del femicidio va más allá del duelo. El 70% de estas familias no tiene ingresos suficientes para cubrir sus necesidades básicas, lo que hace aún más difícil costear terapias psicológicas. Además, muchos de estos menores deben cambiar de casa, de escuela e incluso son separados de sus hermanos, lo que agrava su inestabilidad emocional. Sin acceso a apoyo psicológico, estos niños quedan atrapados en una espiral de desprotección y abandono.
Las principales cuidadoras de estos menores son sus abuelas, quienes, además del peso emocional, enfrentan dificultades económicas y legales para asumir su crianza. UNICEF señala que, aunque el 70% de las familias tiene la custodia legal, solo el 41% ha completado el proceso formal para garantizar la estabilidad de los niños. Sin acompañamiento adecuado, estas mujeres luchan solas para criar a menores marcados por la violencia, sin herramientas suficientes para ayudarlos a superar su trauma.
El femicidio deja cicatrices invisibles en quienes sobreviven, y la falta de atención en salud mental profundiza aún más esas heridas. UNICEF advierte que sin intervención psicológica, estos niños corren el riesgo de repetir patrones de violencia en el futuro. Es urgente que el Estado garantice atención especializada y gratuita para estos menores, asegurando su derecho a sanar y a reconstruir sus vidas en un entorno seguro y protegido.