Joël Le Scouarnec, un excirujano de 74 años, se enfrenta a un juicio que lo acusa de violar y abusar de 299 víctimas, muchas de ellas menores de edad, con una media de 11 años en el momento de los hechos. Los abusos, que se habrían producido entre 1989 y 2014, se cometieron bajo la apariencia de actos médicos, dirigidos principalmente a pacientes jóvenes que, debido a su corta edad, no comprendían la gravedad de lo que sucedía. La gravedad de los hechos ha dejado una profunda herida en las víctimas, algunas de las cuales no recordaban los abusos debido a que ocurrían mientras se encontraban inconscientes o bajo anestesia general.
El caso se remonta a 2019, cuando una de las víctimas, Annabelle*, fue llamada a declarar, revelando que Le Scouarnec la había violado en 2001, mientras era tratada de apendicitis en un hospital en Bretaña. Annabelle, al igual que otras víctimas, no comprendió inmediatamente la magnitud de los hechos. La acusación se construye a partir de investigaciones policiales que descubrieron los diarios de Le Scouarnec, donde presuntamente registraba con detalle cada uno de sus abusos, junto con los nombres de las víctimas. En uno de sus escritos, el cirujano admitió: «Soy un pedófilo y siempre lo seré».
Además de las denuncias por abusos médicos, se hallaron pruebas estremecedoras en la propiedad de Le Scouarnec, como muñecas, dibujos de niños desnudos y material digital que contenía más de 300,000 imágenes y videos de abusos sexuales a menores. Las investigaciones también revelaron que el excirujano había sido condenado anteriormente por violación y agresión sexual a cuatro niños, incluyendo a su vecina de seis años y a dos de sus propias sobrinas, todas menores de cuatro años.
El juicio, que durará cuatro meses, marca la culminación de una investigación de siete años, iniciada tras una denuncia de abuso por parte de la vecina de Le Scouarnec. Si es declarado culpable, el excirujano podría enfrentar hasta 20 años de prisión, además de los 15 años que ya cumple por otros casos de abuso. Las víctimas, tanto hombres como mujeres, se han unido para exigir justicia y poner fin a la impunidad de un individuo que abusó de su posición como médico para perpetrar estos horrendos crímenes