La Policía Nacional ha solicitado que el caso del adolescente de 14 años fallecido en el operativo Apolo 5 en Guayaquil sea trasladado a una Fiscalía especializada en Quito. Según su comunicado del 4 de febrero, buscan evitar cualquier intromisión en la zona donde ocurrieron los hechos y garantizar una investigación imparcial. Además, pidieron que se determine si las armas utilizadas en el operativo corresponden a las entregadas a los agentes y, en caso afirmativo, se analicen las circunstancias en las que se efectuaron los disparos con total transparencia.
El caso salió a la luz luego de que el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH) de Guayaquil denunciara que tres jóvenes fueron víctimas de presunta violencia policial el pasado 30 de enero en el Guasmo Sur. Según la denuncia, Miguel Ángel Rodríguez, de 14 años, murió tras recibir un disparo, mientras que su hermano Juan José, de 16 años, está hospitalizado.
Además, un vecino de los jóvenes, José Daniel Ramírez Erazo, de 18 años, también se encuentra en estado crítico tras haber sido alcanzado por un disparo en la columna vertebral. La familia de las víctimas exige justicia, mientras que el CDH demanda una investigación rigurosa sobre lo ocurrido.
Por su parte, la Policía ha reiterado su compromiso con la transparencia y profesionalismo en este proceso, asegurando que se agotarán todas las hipótesis investigativas para esclarecer lo sucedido y determinar responsabilidades.