La vicepresidenta Verónica Abad retornó a Ecuador este 20 de noviembre de 2024, tras casi un año de estancia en Israel, país al que viajó como parte de su designación como embajadora de la paz. Su regreso ocurre en un contexto de tensión política y bajo la sombra de la sanción impuesta por el Ministerio de Trabajo, que el pasado 8 de noviembre la suspendió por 150 días. La funcionaria, al llegar a la terminal aérea, aseguró que el viaje de retorno fue realizado con sus propios recursos.
Abad declaró que volvió al país para “dar la cara al presidente” Daniel Noboa y exigir que él mismo sustente las acusaciones que se han formulado en su contra. Reiteró que el sumario administrativo que dio origen a su suspensión es ilegal e ilegítimo. Además, afirmó que esta medida la dejó en total indefensión mientras estaba en Turquía, país donde se encontraba en tránsito tras desempeñar su rol en Israel.
La sanción en su contra se produjo debido a su ausencia en la fecha estipulada para llegar a Turquía, un hecho que según el Ministerio de Trabajo, incumplió las responsabilidades de su encargo en el marco de la escalada bélica en Oriente Medio. Cabe recordar que este nombramiento fue realizado por el presidente Noboa en noviembre de 2023, poco después de asumir la presidencia y en un periodo marcado por tensiones evidentes entre ambos tras las elecciones.
El retorno de Abad promete reavivar las diferencias con el Gobierno. La vicepresidenta sostiene que enfrentará el proceso administrativo y las acusaciones en su contra, mientras cuestiona la legitimidad de las sanciones impuestas. Este hecho refleja una de las divisiones políticas más visibles en el actual mandato de Daniel Noboa.
