Fernanda Gudiño fue victima de violencia física, verbal y sexual, por parte de su expareja, y debido a que dependía económicamente de él tuvo que soportar vivir en un entorno lleno de violencia y agresiones. Ahora tiene la oportunidad de capacitarse y poder crear un emprendimiento propio para lograr llegar a la independencia económica.
Fernanda forma parte del proyecto “Laila” que impulsa Mega Mujeres con el apoyo de Embajada de Canadá en Ecuador, que tiene como objetivo contribuir a la reducción de la brecha digital de género de las mujeres a través de capacitaciones en temas digitales para promover su empoderamiento económico.
Karina Ponce, Directora Mega Mujeres señaló que el proyecto durará tres meses y las capacitaciones se realizarán los días martes en Quito y jueves en Cayambe, la jornada de trabajo será presencial y se abordarán temas como: ofimática, redes sociales y también se les brindará conocimientos básicos de ciertos instrumentos útiles en el sector público como la facturación electrónica, la obtención del registro único de proveedores para que puedan inscribirá sus emprendimientos en el SERCOP, entre otros.
Destacó que el proyecto es netamente gratuito y las mujeres que deseen inscribirse pueden hacerlo a través de la página www.megamujeres.org o por el correo centro.atencion@megamujeres.org. Las inscripciones durarán todo el mes y además, se trabajará en conjunto con las mujeres del Centro de Atención Integral para víctimas de violencia de género Manuela León.
30 mujeres víctimas de violencia de la ciudad de Quito ya se han inscrito en este proyecto y podrán iniciar las capacitaciones la próxima semana. Las capacitaciones se las impartirá en espacios que contarán con las herramientas necesarias y que fueron brindadas tanto por el Municipio de Quito como el de Cayambe.
Al finalizar el proyecto esperan llegar a tener 2.000 personas sensibilizadas a través de una campaña comunicacional por redes sociales sobre la importancia de reducir la brecha digital de género para promover la equidad de género. Y que hayan adquirido competencias digitales, con énfasis en los ámbitos de empleabilidad y participación ciudadana a través del activismo digital, generando mejores posibilidades de adquirir y/o desempeñarse eficientemente en un trabajo.
